Una de las funciones principales de un procesador de señal de audio (DSP) son los limitadores. Con ellos garantizamos una entrega de señal máxima a los amplificadores, que se encuentre por debajo de un límite. Este límite suele configurarse por debajo del límite mecánico de los altavoces o bien de un nivel SPL máximo exigido por la aplicación. Si el límite es muy bajo, desaprovechamos nuestro sistema. Si es demasiado alto podemos dañar los altavoces.
Para aplicaciones que utilicen una cadena de señal íntegramente compuesta por nuestros sistemas Amate Audio, hemos desarrollado una aplicación con parámetros de laboratorio que permite aprovechar al 100% la capacidad del sistema sin comprometer la vida útil de nuestros altavoces pasivos. Puedes encontrar la aplicación online en el siguiente enlace: LimCal.